ARCTURUS en Chile: La particularidad musical que siempre es bienvenida #Cronica

La noche del pasado martes 27 de Febrero se venía prometedora. Esta sería la tercera oportunidad que el público chileno tendría para ver a ARCTURUS y segunda en el mítico Club Blondie. Las presentaciones que dio la banda noruega en los años 2013 y 2016, dejaron a sus seguidores con altas expectativas para este nuevo show.

En las afueras del recinto se podía apreciar como el público – distinguible del común de los mortales que merodean el sector – se comenzaba a agrupar para entrar al subterráneo local. A las 20:00 en punto apareció en el escenario la agrupación chilena encargada de abrir la noche y el recinto se fue poblando de a poco a medida que pasaban las canciones. Grata sorpresa fue, para mí y para la mayoría de los que estaban instalados, lo que BLAXEM ofreció. A la fecha la agrupación cuenta con sólo un disco de estudio y ¿cómo no? si sus integrantes ¡parecen haber salido hace poco de la adolescencia!, lo que no quiere decir nada malo, pues su música suena bastante bien y su ejecución es destacable. Media hora duró la presentación de la juvenil banda, quienes agradecidos se marcharon del escenario.

El break de media hora que tuvimos que esperar para que comenzara el show de ARCTURUS, fue tiempo suficiente para que el recinto se llenara prácticamente en su totalidad. A las 21 horas se apagaron las luces y los músicos comenzaron a desfilar hacia el escenario para comenzar con el viaje al que tácitamente fuimos invitados. Cada uno con sus singulares atuendos parecían haber salido de diferentes épocas de la historia y el show, sin más espera, empezó. La soltura con la que la banda dio inicio al show evidenció lo cómodos que se sienten en el escenario chileno.

Con una actitud distendida y una inmensa capacidad histriónica, estos músicos consolidados que no necesitan mayores presentaciones, interpretaron un set de 15 canciones que duró una hora y media -incluido el encore – y se compuso de una elección justa de cortes de los álbumes más importantes de su discografía, pasando por temas clásicos como “Alone”, “Du Nordavind”, “Fall Of Man”, “To Thou Who Dwellest In The Night” y también por otros cortes de sus trabajos posteriores tales como “Kinetic”, “Collapse Generation” y “Crashland”, que fueron los que marcaron los puntos más altos de la noche.

El concierto se desarrolló sin mayores contratiempos, a excepción de un pequeño problema que tuvo el vocalista ICS Vortex con su micrófono, además del sonido saturado que se produjo mientras pasaban las primeras canciones, situación que al parecer no le molestó al frontman o al menos, dado a su carácter bonachón, no se notó su molestia.

Por suerte este inconveniente se soluciono y el show continuó, permitiendo a la banda demostrar su talento y a ICS Vortex desplegar su gran capacidad vocal, sin embargo casi al finalizar el espectáculo hubo otro contratiempo. Esta vez la guitarra de Knut Magne sufrió un percance con alguna de sus cuerdas, hecho que lo mantuvo fuera del escenario al menos durante una canción. Por este motivo ICS Vortex intentó dejar el show hasta ahí, pero sus compañeros decidieron continuar y mientras se solucionaba el asunto con la guitarra, Hellhammer aprovechó el momento para lucirse con un muestra, corta pero contundente, de lo que sabe hacer con la batería.

Siempre será un agrado ver y disfrutar de la energía que desprenden los músicos sobre un escenario, pero en este caso en particular, con esta constelación de músicos que a simple vista se puede percibir que disfrutan enormemente la hermosa expresión artística que realizan, el agrado es mayor.

Dániza Morales Toro